¿Quieren enterarse en qué paró la visita del Comité Central en el municipio de Cruces? Fiasco total, pues tras muchas expectativas de que apareciera un pez gordo del poder, terminaron entrando por el terraplén de la trocha un grupo de personajillos de poca monta, con unos vientres extraordinarios. Desde temprano ya estaban los dirigentes locales comiéndose las uñas, armando una de esas tempestades en un vaso de agua, pidiendo a cada subalterno que no molestara a la delegación con inquietudes. Claro, el Comité Central tiene asuntos más importantes que atender las demandas de un pueblo famélico. Pero en todos los centros laborales los trabajadores estaban como si nada. El sentimiento generalizado es que da igual quien venga. Al final nadie arregla nada y 64 años de experiencia bastan. En fin, dieron merienda a algunos trabajadores. ¡Merienda! Eso sí que fue un suceso. El pobre de Osvaldo Dueñas, nuestro delegado de la agricultura, hizo el ridículo frente a la delegación cuando le preguntaron y no supo decir si había plátano macho en las placitas. Todo esto se desarrolló en el barrio los Almendros, con el objetivo de ver el estado en que había quedado la inversión de una infraestructura, cuyo presupuesto se robaron. ¿No lo sabían? Pase por allí y, si no se cae antes en un hueco, verá el desastre. Qué pena que el guía turístico que acompañó al séquito, no le mostrara el verdadero rostro de nuestro sufrido pueblo. De haber sido yo ese guía, los hubiera llevado a la casa de Jennifer Medina Avalos, apresada injustamente con 15 años de edad, le mostraría las condiciones tan miserables en que vive Odey y sus padres, el estado de abandono en que malviven varias personas en la cuartería al costado de la discoteca, los llevaría hasta la pedrera para que vieran cómo han dejado a esa gente que ni dormir pueden, llegaríamos donde la madre de Yoilén Acosta Torriente, joven de 18 años asesinada horriblemente y que todavía no recibe justicia. El Vía Crusis de nuestro pueblo tiene muchas paradas: hambre, basura, éxodo masivo, gente cansada de tener dirigentes corruptos y miserables, que en cualquier momento los veremos en medio del parque halandose las greñas por un jabón. Casi todas las presidentas de los consejos populares corruptas y brutas; una intendente municipal que compite con Alí Babá, dejando a éste chiquito; un director de Seguridad Social que es lo más canalla que ha parido el pueblo de Cruces, dejando en la miseria a tantas personas vulnerables; un delegado de la agricultura que… bueno, vean ustedes lo del plátano macho; una directora de educación municipal que le ha robado a Dios y a las 11mil vírgenes, con un subdirector alcohólico y pervertido; un guarapito pedófilo que anda suelto llamado Tiri Tiri; un cuerpo de policías que no sirve ni para atrapar a un gato; un equipo de la seguridad del estado compuesto de crápula, delincuentes… y no sigo, porque si voy por cada entidad laboral entonces tengo que hacer un volumen completo. Da igual quien viniera del Comité Central. Todos ellos pisan el polvo y se van a comer para aumentar esos vientres de ballenas. Una vez que dan la espalda, se olvidan de todas esas almas que subsisten en un pueblo cubierto de polvo y dolor. No les importamos un ápice, porque saben que son ellos la causa del mal.
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