En la madrugada del viernes día 3 de febrero, violaron en Cruces a un hombre que sufre trastornos mentales. Por respeto a la privacidad de la víctima no vamos a revelar su nombre. Según describen allegados a la víctima, tres hombres maniataron al infeliz y uno de ellos cometió el acto. Solamente se realizó un arresto, pero varios vecinos alarmados por lo sucedido, dicen haber visto hace poco al violador suelto en la calle.
Apenas en lo que va de mes, está sucediendo lo nunca visto en el pueblo de Cruces. A una mujer que venía del policlínico dos jóvenes intentaron asaltarla para robarle su teléfono y la bicicleta. Gracias a un loco llamado Padilla que empezó a gritar: ¡Auxilio, me violan! fue que la chica se salvó del peligro. Las otras noches en el Central Mal Tiempo unos muchachos que se dedican a vender ajo y cebolla, fueron atracados por una banda de ladrones. ¿Qué estamos viendo? La resaca horrorosa de un sistema social en su punto de ebullición. Y es muy posible que ésta sea la antesala de todo lo que está por venir si la policía no comienza a hacer de verdad su trabajo. La policía es capaz de movilizarse en masa para impedir una manifestación, pero no mueven un dedo para cuidar las calles y detener la avalancha de crímenes que están sucediendo. De las zonas rurales ni hablemos, porque los campesinos tienen sus vidas en manos de la providencia.
Son varios los fenómenos que pueden explicar la situación que se está viendo en el municipio que, dicho sea de paso, es la situación de toda Cuba, con la diferencia de que no en todas partes se filtra la información -aún estamos tratando de identificar a la mujer de Palmira que apareció muerta en el canal de Espartaco, por ejemplo-. Este caldo de horror es provocado por diversos estímulos, entre ellos el nivel de miseria extrema que vive la población, una educación pésima, exclusión laboral y de oficios, desigualdad económica, incompetencia de la policía, sistema judicial blandengue para los criminales, autoridades a nivel de gobierno desconectados de la realidad… En resumen: canibalismo social. Desgraciadamente no se avizoran buenos tiempos. La tendencia de crímenes continuará aumentando si continúa la miseria y el país no produce reformas urgentes.
Son varios los fenómenos que pueden explicar la situación que se está viendo en el municipio que, dicho sea de paso, es la situación de toda Cuba, con la diferencia de que no en todas partes se filtra la información -aún estamos tratando de identificar a la mujer de Palmira que apareció muerta en el canal de Espartaco, por ejemplo-. Este caldo de horror es provocado por diversos estímulos, entre ellos el nivel de miseria extrema que vive la población, una educación pésima, exclusión laboral y de oficios, desigualdad económica, incompetencia de la policía, sistema judicial blandengue para los criminales, autoridades a nivel de gobierno desconectados de la realidad… En resumen: canibalismo social. Desgraciadamente no se avizoran buenos tiempos. La tendencia de crímenes continuará aumentando si continúa la miseria y el país no produce reformas urgentes.
Desgraciadamente nos está tocando vivir momentos muy duros de orror de dolor con hambre miseria y mucho descaro por parte del gobierno. ..nos toca esperar. ..y morir lentamente si no interfieren otros mefios
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