En estado de sitio y bajo vigilancia por la seguridad del estado la casa donde se encuentra refugiado Liván “El burro”, el hombre que trepó a la torre de ETECSA en el municipio de Cruces la noche del 1ro de diciembre. En pleno apagón y después de soportar la agonía por los cortes frecuentes de electricidad, Liván “El Burro” de 40 años de edad, que vive en la zona céntrica del pueblo y a pocas cuadras de la torre, se metió en el patio de la edificación sin ningún impedimento y escaló hasta la parte central de la misma para reclamar su LIBERTAD en un estado de desesperación absoluta. ¡Quiere irse del país! Lo ha intentado sin éxito 5 veces por vía marítima a bordo de una balsa. En la última oportunidad los guardacostas cubanos le lanzaron cables y chorros de agua para ahogarlo en el fondo del mar. A raíz de este intento de fuga, lo sancionaron a 2 años y medio de prisión. “Yo voy a estar aquí en mi casa. No me voy a entregar. Que vengan a buscarme” son las palabras de Liván mientras resiste el asedio del MININT y los agentes de la seguridad que aún no le han dado citación. Las autoridades están mediando a través de su madre y uno de sus hermanos “El Pitufo”, para persuadirlo de entrar a la estación de la policía, donde seguramente le echarán el guante. MOLINOS y nuestro diario continuará al tanto de este acontecimiento local.
LIBERTAD es lo que pide el hombre que subió a la torre de ETECSA en Cruces
En estado de sitio y bajo vigilancia por la seguridad del estado la casa donde se encuentra refugiado Liván “El burro”, el hombre que trepó a la torre de ETECSA en el municipio de Cruces la noche del 1ro de diciembre. En pleno apagón y después de soportar la agonía por los cortes frecuentes de electricidad, Liván “El Burro” de 40 años de edad, que vive en la zona céntrica del pueblo y a pocas cuadras de la torre, se metió en el patio de la edificación sin ningún impedimento y escaló hasta la parte central de la misma para reclamar su LIBERTAD en un estado de desesperación absoluta. ¡Quiere irse del país! Lo ha intentado sin éxito 5 veces por vía marítima a bordo de una balsa. En la última oportunidad los guardacostas cubanos le lanzaron cables y chorros de agua para ahogarlo en el fondo del mar. A raíz de este intento de fuga, lo sancionaron a 2 años y medio de prisión. “Yo voy a estar aquí en mi casa. No me voy a entregar. Que vengan a buscarme” son las palabras de Liván mientras resiste el asedio del MININT y los agentes de la seguridad que aún no le han dado citación. Las autoridades están mediando a través de su madre y uno de sus hermanos “El Pitufo”, para persuadirlo de entrar a la estación de la policía, donde seguramente le echarán el guante. MOLINOS y nuestro diario continuará al tanto de este acontecimiento local.
Amigo mantente firme q lobas alogral Dios te proteja amén
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