(Por Macías Va) La situación con los desechos sólidos en el municipio de Cruces está activando las alarmas en varias pobladores que ven venir el desastre. Es importante aclarar primero que el Vertedero Municipal hace unos años dejó de localizarse a mediación del terraplén que comunica a Cruces con el Central Ciudad Caracas y ahora el fenómeno está en la curva de la carretera Cruces- Batey Maltiempo, por un camino que conduce a la Loma de La Rioja. Lo cierto es que los conductores de los vehículos que transportan la basura (la mayoría de ellos de tracción animal) quieren ahorrar tiempo por el estrecho callejón de este terreno y arrojan todos los desperdicios en los alrededores de la carretera. Este fenómeno, en los días que hace mucho viento, hace que los restos de basura y el mal olor deambule a sus anchas. Ningún funcionario de Comunales toma cartas en el asunto, ni tampoco las autoridades del Gobierno Municipal. Ya que a nadie le importa, el monto de basura amenaza con invadir la carretera. Se suman las quejas de pobladores de argumentan no ven pasar ningún carro de Comunales por sus calles a recoger la basura, además de los robos de los sacos que van a parar a los carboneros. Exceptuando el síndrome respiratorio por el que atravesó el mundo, las demás enfermedades que afectan a la población se originan por la inmundicia depositada en todas partes. Aguas contaminadas, alcantarillas infestadas, basura en suelos de cultivo, etc. El gobierno local, que tiene un largo historial en evadir responsabilidades, parece desatenderse de sus prioridades. Velar, administrar, supervisar y mantener el sistema de desperdicios del pueblo, está en manos de cualquier sistema de gobierno en un área urbana.
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